Las puertas de garaje cumplen varias funciones: estética, funcional y de seguridad. Entre otros cometidos, protegen los garajes contras las inclemencias del tiempo, tanto cuando hace frío como calor. Hoy en Martín Vecino hablamos de los diferentes problemas que pueden experimentar las puertas automáticas cuando hay tormenta.

Puertas automáticas cuando hay tormenta

Empezaremos comentando que las puertas de garaje, tanto manuales como automáticas deben instalarse por profesionales acreditados y formados para ello. Una correcta instalación y mantenimiento evitan muchos problemas durante la vida útil de la puerta.

Por un lado, la puerta debe estar correctamente instalada para evitar que entre agua en el garaje en caso de lluvia. Por otro lado, su instalación debe realizarse atendiendo a las condiciones climatológicas del lugar donde se utilizará. Las horas de luz, la cantidad de lluvia que cae, la humedad del ambiente, etc, son factores a tener en cuenta para elegir materiales, tipos de puerta, etc.

Pero si hay una cosa que se puede saber a largo plazo es cuándo caerán tormentas y cómo afectará a la puerta de garaje.

Problemas por humedad

Los motores deben instalarse de manera que queden protegidos contra las inclemencias climáticas. Es decir, evitar que les entre agua o que la humedad pueda afectar a su funcionamiento.

Esto es especialmente importante para los motores de puertas correderas que se instalan a la intemperie, como es el caso de los accesos a fincas. Por tanto, revisar que todas las juntas están perfectamente y que no hay roturas ni grietas en el lugar que los contiene y protege.

Problemas por cambios de tensión

Otro de los problemas que suelen sufrir las puertas automáticas cuando hay tormenta es un cambio de tensión. Una tormenta fuerte podría estropear el motor.

Algunos picos de tensión desconfiguran el motor, mientras que otros pueden hacer que se estropee algún componente importante.

Si se va la luz y cuando ésta regresa el motor sigue sin funcionar, lo mejor es contactar con un servicio técnico. Por motivos de seguridad, la manipulación de un motor y sus componentes debe realizarla solamente personal cualificado.

En algunos casos, la luz se va y tarda en volver el suministro eléctrico. Para estas ocasiones, es práctico saber cómo poder abrir la puerta de manera manual.

Siempre que sea posible, es recomendable desconectar la corriente que alimenta el motor de la puerta del garaje cuando sabemos que va a haber tormenta.

Otros daños importantes en puertas automáticas cuando hay tormenta

Por último, cuando la tormenta viene acompañada con granizo, es importante revisar que no se hayan producido daños relevantes, tanto en la puerta en sí, como en los raíles por los que se desliza y el motor.

Ante cualquier duda, es mejor no utilizarla y contactar con el técnico de mantenimiento. La seguridad es lo primero.